Castle Rock

Nuestro periplo bloquero/escalatoril por los Estados Unidos empezaba a tocar a su fin y decidíamos ir acercándonos poco a poco a las zonas de escalada cercanas a San Francisco, así que de esta manera pusimos rumbo a la famosa costa Californiana, todo un día entero de conducción fue suficiente para acercarnos a la costa , nuestro objetivo era la famosa y conocida zona de Castle Rock encima de Santa Cruz y al sur de San Francisco.

Esta zona es muy famosa por los grandes problemas de boulder que resolvió Chris Sharma en la antológica película Rampage, junto a Obe Carrion y Josh Lowell, aún mas se popularizo cuando el primero vivía a pocos minutos de la zona y hizo de ella su patio de juegos dejando verdaderas joyas como Sharma Traverse, a esto hay que sumarle que su parecido con Bleau (Paris) es casi idéntico, sus formas, su textura y tacto, y para nosotros fue todo un descubrimiento.

Nuestra llegada al aparcamiento seria sonada en posteriores días, no me puedo imaginar lo que les cayó a aquellos cuatro "aprendices de Rangers", pero eso más tarde.

Dentro de la zona de Castle Rock decidimos visitar los sectores Castle Rock, Magoos, Pyramid Rock y Parking Lot Rock.

Como fanáticos nos costo centrarnos y elegir algún bloque humano para poder calentar, y de esta manera empezamos y acabamos el día con Tree Route, Mr Magoo, The Swim, Dog Dish Traverse, The Slap, Domino Theory, Domino y muchos más problemas que no tienen nombre pero que todos sin exceptuar ninguno eran verdaderas joyas.

Hacia el mediodía el sol comenzaba a apretar y por mucho que sea una zona boscosa un poquito de calor hacia, así que intentábamos trasladarnos al sector Parking Lot Boulder, pero ya llevaba mucho tiempo que no tenia mi característico pinzamiento en la cadera derivado de una vertebra, así que para mi fue toda una odisea desplazarme hacia el sector, es un tipo de dolor que incluso produce risa, no porque lo tenga yo, si no por su alojamiento, incluso hay ocasiones que pierdes las fuerza en la cadera y no puedes aguantarte de pie, pero como ya es algo normal después de un periodo sin Osteopata y llevamos el botiquín encima, mi querida mujer (porque recordar que ya estamos casados) me dispenso dos antiinflamatorios, aquí (en los USA) dos equivalen a uno de los nuestros, pero para mi sorpresa, en cuestión de cinco minutos me cogía una ñoña que no había sentido nunca (parece ser que llevan una sustancia que da sueño), me quede relajado y volando en una nube, mi dolor menguaba lo suficiente como para poder mantenerme de pie gracias a mi bastón de Follet Tortuga.

Una agradable y cómoda piedra de arenisca fantástica con sus formas redondeadas me dio cobijo, mientras mis compañeros acrivillaban a intentos Tree route (sit) y ya medio dormido los escuchaba como se quejaban y disfrutaban, mientras yo solo pensaba que mis vacaciones habían tocado fin. Pasados 20 minutos de siesta alucinógena, ellos seguían liados con este maravilloso problema de boulder de muchos movimientos con inicio sentado, mi despertar maravilloso me dejaba secuelas, el antiinflamatorio no hacia todo el efecto deseado y ponerme en pie fue una odisea, pero gracias a mi bastón todo era más fácil.

Le pregunto a Met que tal el problema de boulder, y me comenta que es una pasada pero que caen en el ultimo movimiento, es alto, y su salida es rara, mientras cogeo y me tambaleo, los tres ríen, pero ríen mucho, porque aquello parece un chiste, les digo que le daré un pegue de aquellos a muerte al Flash, se ríen, no puedo apenas caminar, ni agacharme, el bastón es mi amigo y yo lo cuido como tal, gracias a el, puedo acercarme mi bolsa de magnesio, me tiro en las colchonetas, literalmente y como puedo me calzo los pies de gato, ellos siguen riendo, la estampa es surrealista.

Met me hace un Flash de los buenos, con todos sus métodos y los métodos de Domenec, yo decido que por altura el método Domenec puede ser que me vaya muy bien, como buenamente puedo me arrastro hasta el inicio del problema que empieza sentado, me queda un buen trekking para llegar a su cima y voy cojo, muy cojo, pero en la vertical todo se cura, ellos siguen con un descojone inmenso, mi bastón esta a salvo.

Intento inhumano a muerte, regleta cierro de puño, taloneo, bicicleta, suco magnesio mientras empotro una rodilla en el gran agujero, una y la otra, pillo mal el canto de salida, pero aún y así me remonto, le bloqueo al pecho y la pierna derecha totalmente plegada, saco la mano derecha y lanzo a la pinza que hace de Top, y...... zas, patinazo de pie y caigo como un saco de patatas, estoy bien, gracias a Met, se siguen descojonando al ver que con lo lisiado que iba y aún incorporandome con el baston le habíaa dado un intento épico, al siguiente intento salí vencedor por la parte superior del bloque, cojeando, Met lo encadeno unos intentos después.

De esta manera volvíamos al coche y dábamos por concluida nuestra estancia en Castle Rock, unas cervezas en un pueblo cercano y aquella noche decidíamos dormir en el aparcamiento como aquellos amables "aprendices de Ranger" nos explicaron, nos enseñaron donde dejar el famoso sobre con el dinero y con los datos, algo típico allí.

Ya de noche, tan solo nos quedaba montar la tienda y preparar la cena, yo me pongo con la tienda y los chicos se encargan de la cena, no han pasado ni 2 minutos que aparece un Sherriff, bautizado como John Mac Callaghan por (Domenec y yo), levantando una gran polvareda, luces a ritmo de persecución policíaca y un "Hello Good Night".

-Ferran: Domenec puedes salir tu que hablas ingles tenemos aquí al Ranger que nos viene a tocar los huevos.

-Domenec: Hello Good Night, asdashdasdjhadaskhdahdhahdahsdha.

A partir de aquí me perdí, pero resumiendo, aquel Sheriff de pantalones de pitillo apretados y chapa metálica en forma de estrella nos pidio los Pasaportes y nos intento acojonar todo lo que quiso y mas, al explicarle que aquellos aprendices de ranger, que hacían trabajos de restauración de barandillas y del parking nos habían confirmado lo que ponía en la guia de escalada que era posible pernoctar allí, nos dejo muy claro que eramos unos mentirosos, Domenec, le hizo una descripción de aquellos cuaro Rangers, Laia igual, y al final entro en razón, pero insistía que aquello nos lo habíamos inventado.

Después de mucho dialogo y mucho rollo soy el Sheriff y aquí mando yo, por fin decidio ayudarnos y explicarnos donde exactamente podíamos dormir sin infringir la ley, por fin teníamos un poco de calma, yo deje de cojear de golpe.

Al amanecer el Sheriff Mac Callaghan paso a la historia como un hombre perturbado, abandonado por su mujer en su juventud cuando tan solo era un patrullero de Santa Cruz, que le gustaba el café en grandes dosis y al que su hija había repudiado por su dedicación en cuerpo y alma a ser polícia.

Así que con esta espectatíva no teníamos muchas ganas de cada día recorrer 1h 30 minutos de coche para ir a escalar y decidimos mudarnos a lo que ya seria el final de nuestro viaje, Mickey's Beach, pero eso es otro post...